El auge de la festividad de Halloween en España ha provocado que en estas fechas se adopten costumbres y tradiciones típicas de esta fiesta americana. Es el caso de la decoración de espacios con calabazas. Estas pueden estar trabajadas para presentar un aspecto terrorífico o simplemente colocarse por su atractivo como ornamento.
Pero en el mundo, y en concreto en nuestro país, se cultivan muchos tipos de calabaza, más allá de la típica “Ruperta” que vemos estos días en los escaparates.
- La calabaza Butternut, o de cacahuete, es la más cultivada en España. Es la más usada en cocina para preparar cremas o para servir como guarnición en algunos platos.
- Calabaza ‘Dulce de horno’, más conocida como ‘redonda de asar’. Como indican estos apelativos es la calabaza que hemos tomado tradicionalmente como postre. Pertenece a la familia de las Cucurbita maxima Duchesne, dentro de la que también encontramos la variedad Turbante, muy usada en ornamentación.
- La calabaza de Cabello de Ángel de cuya pulpa se extrae, como indica su nombre, este ingrediente de repostería. Estos frutos no son naranjas, sino que su exterior se tiñe con tonalidades verdes y blancas.
España es el país de la Unión Europea que más calabazas produce. Según datos de Eurostat, la Oficina Estadística de la Unión Europea, nuestro país produjo en 2019 unas 115.000 toneladas de esta hortaliza. Le siguieron en cuanto a valores de producción Francia y Alemania, con 96.000 y 92.000 toneladas, respectivamente.
La demanda de calabaza en España se ha incrementado notablemente en los últimos años, hecho que se constata en la superficie dedicada a este cultivo que se ha incrementado en un 200% en la última década. La Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación recoge que en 2010 las hectáreas dedicadas a la producción de calabaza eran 1.887. En 2019, el mismo sondeo indicaba que la cifra había aumentado hasta las 3.739 hectáreas.
Por comunidades autónomas, en cuanto a distribución por áreas dedicadas a este cultivo destaca la Comunidad Valenciana con 1047 hectáreas, casi un tercio del total de la superficie de todo el país. Le siguen Castilla y León y Andalucía, con 666 y 418 hectáreas, respectivamente.